Los hackeos de cuentas de redes sociales y correos electrónicos, así como de servidores de páginas web se han vuelto costumbre de los hackers o piratas informáticos en los últimos años. Los robos a través de medios electrónicos son cada vez más frecuentes y se han convertido en un problema de seguridad bastante alarmante. Las contraseñas toman entonces un papel importante, pues son ellas las que pueden ayudarnos a blindarnos contra estos ladrones de información.
Hackeo y robo de información
Los robos del siglo XXI se cometen ya no sólo a mano armada, sino desde la comodidad de una casa con un ordenador. Y es que hacerse con la información de una persona, para un hacker, puede ser un trabajo que le demore menos de un minuto; si esta persona no toma las medidas necesarias para proteger sus cuentas de correo y redes sociales, así como de banca electrónica.
Los robos por este medio han sido millonarios en los últimos años, y es por eso que la mayoría de las entidades bancarias del mundo exigen una serie de protocolos de seguridad para ingresar a sus portales, siendo la contraseña y el usuario uno de los más importantes.
Contraseñas inviolables
Contraseñas que contengan nombres, fechas de nacimiento o números de documentos de identidad, son las más sencillas de vulnerar pues son las más predecibles. Los usuarios de las distintas plataformas deben optar por crear contraseñas que sean difíciles de adivinar y que guarden poca o nula relación con información que sea de dominio público.
Algunos sitios webs o plataformas han llegado a incluso a exigir que las contraseñas de sus usuarios posean algún patrón de caracteres que haga que el trabajo de aquel que quiera robar nuestra información electrónicamente sea más difícil, sino imposible. También se han valido de otras herramientas de protección de seguridad como reconocimiento de imágenes o preguntas de seguridad.
¿Qué debe contener mi contraseña?
Una contraseña, para ser segura, debe contener al menos 1 letra, 1 mayúscula, 1 número y un carácter especial, y debe tener una longitud de al menos ocho caracteres en total. Se debe evitar utilizar números en serie, así como letras consecutivas. La contraseña “Abcd123!” cumple con los requisitos antes mencionados, pero es una contraseña predecible y por tanto se debe evitar su utilización si queremos estar protegidos.
No sólo nuestra seguridad física es importante, hoy en día es posible acceder a prácticamente toda nuestra vida a través del internet y las redes sociales; debemos asegurarnos de que toda nuestra información se encuentre segura y resguardada de hackers o piratas informáticos.