Rogelio Hackett, desde el anonimato de su computadora, logró generar más de 100 mil dólares para él y pérdidas que se calculan en 36 millones de dólares para los bancos.
El hacker obtuvo 675 mil números de tarjetas de crédito a través de su destreza para accesar, de forma ilegal, a los ordenadores de negocios, bases de datos e incluso comprando esos números a través de foros en Internet.
Esa clase de foros están compuestos por personas que se dedican a vender información de cualquier tipo, incluyendo datos personales e información de tarjetas de crédito. Incluso, Hackett tenía esta clase de foros en donde vendía los números de tarjetas de crédito por 20 o 25 dólares cada uno y por el cual obtuvo ganancias del orden de los 100 mil dólares.
El departamento de Justicia de Estados Unidos, en base a la confesión de Rogelio Hackett Jr., aseguró que además de vender información también fabricó y vendió tarjetas fraudulentas. A su vez, y haciendo uso de sus habilidades, también realizó compras de todo tipo para su beneficio propio.
En esta ocasión, los principales afectados son las compañías de tarjetas de crédito que han rastreado más de 36 millones de dólares en transacciones fraudulentas de Hackett.
Rogelio Hackett optó por declararse culpable de los cargo de tráfico de tarjetas de crédito y usurpación de identidad. En total recibirá 12 años de prisión, 10 años por el primer delito y 2 por el segundo, además de una multa de medio millón de dólares.
Casos de esta índole son un recordatorio constante de la fragilidad de algunas instituciones y, al mismo tiempo, de lo propensos que son los usuarios de ser estafados por una persona que vive en el anonimato, del otro lado de un monitor.
Fuente: SEXENIO